El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Cañete condenó a Osvaldo Parra Flores a 10 años de presidio efectivo, como autor del delito consumado de conducción de vehículo motorizado en estado de ebriedad, lo cual provocó muertes y heridos graves tras un accidente ocurrido en enero de 2022 en Curanilahue.
En fallo unánime, el tribunal aplicó al acusado las accesorias legales de inhabilidad perpetua para conducir vehículos de tracción mecánica, la inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos, y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras dure la condena; además del pago de una multa de 6 UTM.
En tanto, el tribunal dio por acreditado que alrededor de las 04:30 horas del 21 de enero de 2022, el acusado conducía en estado de ebriedad –con 1,13 gramos de alcohol por litro de sangre– una camioneta de su propiedad en compañía de un pasajero. Cuando se desplazaba por la Avenida O’Higgins de Curanilahue, en dirección al sur oriente, el vehículo traspasó el eje central de la calzada y colisionó a otro automóvil que terminó chocando contra la solera.
“Como consecuencia de la colisión, el conductor José Miguel Rivera Medina, y uno de los pasajeros del mismo vehículo, Nicolás Aníbal Ibáñez Fica, resultaron fallecidos por politraumatismo. Por otro lado, Camila Belén Rojas Toledo, resultó con lesiones de carácter grave, que le produjeron incapacidad entre 105 a 140 días; al igual que Yordiana Makarena Medel Caripán, que le produjeron incapacidad entre 45 a 55 días; mientras que, Óscar Alfredo Cid Moraga, resultó con lesiones de carácter leve, con incapacidad de entre 7 y 10 días. Finalmente, Pablo Andrés Villarroel Villarroel, pasajero del vehículo conducido por el acusado, resultó con lesiones indeterminadas. Ambos vehículos quedaron con daños de consideración”, señaló el tribunal.
Fuente: https://www.soychile.cl/concepcion/policial/2024/07/05/867492/pena-conduccion-ebriedad-muerte.html
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